
El velo de novia es uno de los accesorios más importantes para lucir divina el día de tu boda además de ser uno de los complementos con más historia y tradición alrededor del mundo. Ningún vestido de novia, por bonito que sea y lo bien que te quede, estará completo sin un velo previamente seleccionado; el bajo y el escote del vestido de novia son dos de los aspectos fundamentales que deberás mirar para seleccionar un tipo de velo u otro. Es por ello que la primera pregunta que debes de hacerte a la hora de elegir tu vestido es: ¿qué tipo de velo de novia debo usar?.
Puedes comprar el velo en una tienda o hecho a medida, incluso es posible que encuentres algún modelo más barato en tiendas de segunda mano, outlet para novias o en tiendas de venta online; en cualquier caso tendrás que tener en cuenta el estilo del vestido para comprobar que se ajusta correctamente al velo seleccionado.
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La importancia del velo para la novia
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El velo resulta tan versátil que te permitirá tapar las imperfecciones de tu silueta y cara o al revés, resaltarlos. Es solo cuestión de analizar a quién favorece cada tipo de velo: ¿Tienes unos brazos muy gruesos y no quieres enseñarlos? Opta por un velo largo tipo mantilla en el que te puedas envolver. ¿Tu cuerpo es tipo reloj de arena y quieres resaltar la cintura? Elige un velo corto por los hombros que no tape el vestido. ¿Tu rostro tiene una forma muy redondeada? Evita velos cortos y adheridos a los lados de la cara.
A continuación te contamos todos los detalles para que puedas elegir el velo más apropiado para tí. Ten en cuenta que el tipo de peinado puede interferir con llevar un estilo de velo u otro, por lo que decide previamente el que vas a hacerte, o bien, escoge de entre todos los peinados, aquel que mejor combine de acuerdo al velo que hayas escogido.
El estilo del velo
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Hay muchos estilos de velos, desde los más tradicionales hasta los velos más innovadores y originales y cada uno tiene unas características determinantes. Vamos a ver cuáles son:
- Velo Red, Velo Francés o Velo Visera. Este es el tipo de velo más corto que encontrarás. Se trata de uno de los tipos de velo que apenas cubren la cara y se suele sujetar a un lado por un broche, diadema, lazo o flores. Los tocados y sombreritos coquetos son adecuados para llevar con este velo. Normalmente se hacen con malla o red y quedan genial para vestidos tipo tubo o con espalda descubierta. Recomendado para novias con personalidad retro y moderna para llevar en una boda de día.
- Velo Pequeño o Blusher. Este se suele confundir con el velo red, siendo la diferencia principal que el velo blusher debe llegar por los hombros (mide entre 55-65 cm) y cubre la cabeza además de la cara. De ahí que también se le llame velo corto. Ideal para mostrar la parte superior de los hombros con vestidos escotados tipo palabra de honor o cuello barco. Puede convertirse en una opción si quieres enseñar los apliques bordados de tu vestido del busto para abajo. Sin embargo no te favorecerá si tu cara tiene forma redondeada ya que la ensanchará.
- Velo hasta el codo o Elbow. Llega hasta los codos (unos 65 cm), y es considerado como uno de los más cómodos. La mayoría se recogen en la nuca con un fruncido que despeja los lados de la cara. Favorece sobre todo a las novias de rostros alargados y orejas pequeñas. Adecuado para vestidos cortos y de corte romántico ya que permite presumir de piernas y de falda.
- Velo a la Cadera. Aquí la confusión se puede crear con el velo que llega hasta la punta de los dedos y que veremos a continuación. El velo a la cadera se caracteriza por ser unos 10 centímetros más largo que el velo hasta el codo y por aportar elegancia y clase a vestidos de novia sin cola. Si es de tela tupida y ligeramente más oscura que tu vestido te permitirá disimular caderas anchas.
- Velo Capa, Fingertip o Velo hasta las Puntas de los dedos. Cuando extiendes tu mano del todo a lo largo de tu cuerpo las puntas de tus dedos marcan la medida de este velo (unos 90 cm), uno de los más utilizados por las novias. No queda bien en el caso de mujeres bajas ya que tiende a restar altura. Este velo es la medida estándar intermedia tanto para trajes más formales como informales.
- Velo hasta las rodillas. Sobrepasa los 100 centímetros y llega hasta las rodillas permitiendo mostrar las piernas si se lleva un vestido de novia corto. No debería emplearse en vestido muy largos, formales y adornados ya que perdería protagonismo frente a la magnificencia de éste.
- Velo Waltz, Ballet o hasta los tobillos. Este velo llega hasta los tobillos pudiendo en ocasiones rozar ligeramente el suelo. Se concibió para bailar el vals en las bodas, de ahí su nombre. Si tiene ondas permitirá suavizar una cara angulosa, y si es fino enmarcará una cara alargada. Lo mejor es que el vestido sea más largo que el velo para que no se vea desparejo. Es ideal para combinar con vestidos de novia de estilo vintage.
- Velo Capilla. El velo se prolonga sobre el suelo, pero normalmente la cola no sobrepasa un metro. Se considera un velo muy elegante y sofisticado que admite vestidos de corte formal y mangas estructuradas, largas o cortas. Idóneo para novias de cara ancha o redonda ya que ayuda a que los rasgos pierdan el volumen y se vean más finos.
- Velo Catedral. Este es el más largo y la cola suele sobrepasar con facilidad los 3 metros. Muy utilizado en bodas reales y enlaces de la alta sociedad en los que se exige cierto protocolo a la hora de vestir, es uno de los tipos de velos más antiguos. La tela con la que se elabora es de la mejor calidad, con bordados dorados y plateados, lentejuelas, ristras de perlas pequeñas, etc.Si optas por este tipo de velo elige bien los zapatos para no llevarte ningún susto.
- Mantilla. Este velo es típicamente español y suele estar hecho con gasa y blonda además de emplear bordados en los extremos. Se sujeta con un prendedor en el centro del recogido en el pelo y llega más o menos por las caderas. El prendedor al estar en el medio permite equilibrar unos rasgos triangulares. También se le conoce con el nombre de velo amantillado.
- Velo Fuente. Este velo es muy versátil y funcional; empieza en la nuca, envuelve delicadamente los hombros y cae sobre la cara quedando algo más corto que en la parte trasera y trazando ondas sinuosas. Sirve para disimular unos hombros anchos.
- Velo Pirata. Este velo es de reciente aparición y de corte moderno. Se trata de recoger el pelo bajo el velo sujetándolo atrás en forma de una cola con accesorios como un pasador o una goma de pelo blanca con brillantitos. Si quieres llevar el pelo suelto sin duda el velo pirata se convertirá en tu mejor aliado.
El ancho y las capas del velo
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Determinar las proporciones exactas de ancho que tendrá el velo es muy importante para adecuarlo al vestido y al resto de los complementos. Existen 3 anchos para velos de novia que son los siguientes:
- Ancho normal. No suele sobrepasar los 150 centímetros y no llega a cubrir del todo los lados ni la parte superior del cuerpo del vestido. Si deseas mostrar los brazos y algún accesorio del vestido este es el largo necesario. Cubre la espalda por lo que no va bien con vestidos de espalda descubierta.
- Ancho medio. Suele rondar entre 180-190 centímetros y cubre los hombros y un tanto los brazos por lo que va bien para disimular alguna imperfección que te incomode. Puedes emplearlo en trajes de tirantes o románticos.
- Ancho superior. Sobrepasa los 200 centímetros y rodea los hombros totalmente por lo que podría ser una opción a tener en cuenta si celebras tu boda en invierno o de noche. Este tipo de ancho no favorece nada a los vestidos más formales y sofisticados.
Las capas del velo variarán dependiendo del traje de novia seleccionado y por supuesto de lo cómoda que te sientas con cada diseño. Puedes añadir hasta 3 capas a tu velo, cada una de las cuales le aportará un toque diferente. Si no te gusta puedes obviar la capa que cae sobre el rostro y que se levanta para besar a la novia.
- Una capa. Para vestidos tipo tubo y elegantes. Permite mostrar el peinado, por lo que si llevas un recogido elaborado elige este tipo de velo.
- Dos capas. Para novias más informales y divertidas. Aptas para llevar con vestidos a media pierna y cortos. Se recomienda dejar el pelo un tanto suelto a los lados para potenciar las capas del velo. Ideal para novias con rostro en forma de corazón; una de las capas tiene que tocar el mentón.
- Tres capas. Adecuadas para las novias más románticas, con vestidos de manga francesa y con vuelos en el bajo. Hay que llevar un recogido sencillo e informal o dejar el pelo suelto ya que no se verá bajo las capas, especialmente si el velo es tupido.
Los colores y la textura del velo
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A pesar de que se piensa que hay que llevar un velo preferentemente de color blanco inmaculado, nada más lejos de la realidad. Existen varias tonalidades de blanco que puedes optar por llevar en tu velo, como el marfil o el lino. También se admiten otros colores como el gris perla, el rosa pálido (con telas transparentes) y el plateado.
Escoge una textura concreta para tu velo. Los velos más cortos se hacen de telas más ligeras como tules, gasas y sedas, especialmente si llevan varias capas. Los más largos se fabrican en materiales más tupidos y consistentes, tipo cretona y chifón. Puedes añadir detalles decorativos a tu gusto a los bordes del velo e incluso combinar varias telas para crear un velo personalizado.
El velo resultará más rugoso al tacto si lleva bordados o apliques; en cambio si es totalmente liso y está hecho en una pieza tendrá un tacto más suave y aterciopelado. Pero la calidad del velo y su precio no dependerá de su tacto, sino del material que se ha empleado para su fabricación, los detalles ornamentales, el peso, la longitud, las capas y el modisto que ha confeccionado el velo (algunos diseñadores famosos llegan a cobrar hasta 300 euros por un velo considerado de tipo medio).
Detalles a tener en cuenta a la hora de comprar el velo
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Seguir algunas pautas a la hora de elegir tu velo te ayudará a tomar una mejor decisión y adquirir la pieza perfecta.
- El entorno en el cual se llevará a cabo la celebración es importante para elegir el velo. Si te casas por todo lo alto en una catedral y celebrando el banquete en un castillo, lo mejor es que elijas un velo estilo catedral o capilla para las bodas formales. En cambio si tu enlace es más bien divertido y se celebra en la playa o una iglesia pequeña lleva un velo hasta los hombros, las puntas de los dedos o hasta las rodillas. El velo francés es apto tanto para novias clásicas como modernas.
- Analiza el terreno por el que te moverás. No querrás ir arrastrando un velo de tres metros de cola por encima de los charcos que pueden salpicar el jardín o enredarte con las lámparas demasiado bajas si llevas un velo de varias capas. Examinar el terreno previamente a la compra de un velo puede parecer una idea absurda, pero resulta muy útil a la hora de disfrutar de la celebración.
- Tu velo no tiene por qué seguir todos los dictados de tu vestido. Generalmente el velo tieneque ir en conjunto con el vestido, pero si quieres cambiar algunos detalles que rompan la norma puedes tomarte la libertad. Por ejemplo, si el vestido es blanco puro y tu quieres un velo rosado en vez de blanco puedes añadir un reborde o hilos de este color.
- Si el traje de boda es de líneas sencillas y limpias, sin grandes adornos visibles, puedes escoger un velo más suntuoso y enjoyado si quieres que destaque más; en cambio si deseas que no atraiga mucho la atención opta por uno también sencillo. Combinar un velo enjoyado y excesivamente adornado con un vestido de iguales características sólo es apto para bodas de alto postín.
- El velo con muchas capas recrea frecuentemente el estilo romántico y va con vestidos de corte asimétrico o con fruncidos en la zona del pecho. Los velos transparentes permiten sugerir sin mostrar excesivamente, como el encaje del cuello del vestido, un bonito bordado en el pecho o la espalda al aire. Los velos tupidos y hasta los codos disimulan muy bien los defectos del cuerpo de cintura para arriba.
Marcas de velos más conocidas
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Si quieres comprar un velo hecho con cierto prestigio tienes un pequeño recopilatorio de las marcas de velos más conocidas en España:
- Pronovias. Sin duda una de las marcas más conocidas a nivel nacional e internacional en el sector de enlaces y bodas. Sus diseños son bastante exclusivos y caros y tienen desde velosformales hasta informales. Velos de encaje, tipo mantilla o largos tipo catedral son sólo alguna pequeña muestra de lo que podemos encontrar en sus colecciones.
- Jesús Peiró. Afincado en Barcelona este reconocido modisto ha dedicado su vida a vestir a novias de pies a cabeza. Puedes encontrar velos muy versátiles y ponibles para llevar durante el día o por la noche, especialmente carcaterizados por su ligereza y calidad similar a la alta costura parisina.
- Del Pozo. Recientemente la empresa se ha aventurado en el sector nupcial con unos resultados espectaculares. La mayoría de sus velos de novia son fabricados a mano y llevan añadidos elegantes dibujdos formados por una redecilla de hebras finamente entrelazadas y otros detalles.
- Luisa Monzón. Esta diseñadora se encarga de diseñar los velos al gusto de sus clientas (al igual que los vestidos) o arreglar los velos que han quedado dañados o se han roto. Los velos se entregan montados o desmontados. Gran variedad de telas, estampados, apliques decorativos y estilos.
Sigue estos tips para elegir el velo de novia ideal y disfruta del día más romántico de tu vida. Combina bien tu velo con los colores del maquillaje, el pelo, los accesorios, el lugar de la boda y el vestido de novia para que estés perfecta. Tener en cuenta todos estos aspectos es fundamental para evitar que tu velo se convierta en parte de un disfraz en lugar de en un complemento perfecto para tu vestido de novia.