
¿Has pensado alguna vez en hacerte un piercing en el labio? Si es así, este artículo es perfecto para ti. A continuación, te contaremos todo lo que necesitas saber sobre los diferentes tipos de piercing labio, sus cuidados y los riesgos asociados. Pero antes, vamos a plantearte una pregunta interesante: ¿Sabías que hay un tipo específico de piercing labio que puede ser menos doloroso y más fácil de cuidar que otros? ¡Sigue leyendo y descúbrelo!
Tipos de piercing en el labio
A la hora de elegir un piercing labio, hay varias opciones disponibles. A continuación, te presentamos los tipos más populares:
1. Labret
El labret es un piercing labio que se ubica en el centro del labio inferior, justo debajo de la línea donde se encuentran los dos labios. Puede ser menos doloroso y más fácil de mantener que otros tipos de piercing labio, ya que no se encuentra en contacto directo con los dientes o encías. Es una de las opciones más clásicas y versátiles.
2. Monroe
Este tipo de piercing labio está inspirado en el famoso lunar de Marilyn Monroe y se coloca en el labio superior, generalmente en el lado izquierdo. Es una opción elegante y sofisticada para quienes deseen un look distintivo.
3. Medusa
El piercing medusa se ubica en el centro del labio superior, justo debajo del arco de Cupido. Es similar al labret, pero en la parte superior del labio. Este tipo de piercing puede ser muy llamativo y atractivo.
4. Snake bites
Los snake bites son dos piercings labio inferiores colocados simétricamente a ambos lados del labio. Dan la apariencia de colmillos de serpiente y son una opción popular para quienes buscan un estilo más audaz y rebelde.
5. Spider bites
Este tipo de piercing labio consiste en dos perforaciones cercanas entre sí en uno de los lados del labio inferior. Aporta un toque de originalidad y atrevimiento a tu look.
Cuidados para tu piercing labio
Una vez que hayas decidido qué tipo de piercing labio quieres, es esencial conocer los cuidados necesarios para mantenerlo en perfecto estado. Aquí te ofrecemos algunos consejos importantes:
Limpieza
Mantén el área del piercing siempre limpia, lavándola con un enjuague bucal antiséptico y agua tibia después de cada comida y antes de acostarte. También es importante limpiar la parte exterior del piercing labio con un jabón antiséptico suave y agua tibia dos veces al día.
Alimentación
Durante las primeras semanas después de hacerte el piercing, evita alimentos picantes, calientes o difíciles de masticar. Opta por alimentos fríos o templados y de textura suave para evitar irritar la zona.
Evita tocarlo
No toques tu piercing labio con las manos, ya que esto puede introducir bacterias en la herida y causar una infección. Si necesitas ajustar el aro, lávate las manos cuidadosamente antes de hacerlo.
Cambio de joyería
No cambies la joyería del piercing hasta que haya cicatrizado completamente. Esto suele tardar entre 4 y 8 semanas, aunque puede variar según la persona. Cambiar la joyería antes de tiempo puede causar irritación e infección.
Riesgos asociados con el piercing labio
Aunque los piercings en el labio pueden ser una forma estilizada y atractiva de expresarse, también conllevan ciertos riesgos. Es fundamental conocerlos antes de decidir hacerte uno:
Infección
El riesgo de infección es una preocupación común para cualquier tipo de piercing. Asegúrate de seguir las pautas de cuidado mencionadas anteriormente y acudir a un profesional experimentado y certificado para minimizar este riesgo.
Daño dental y gingival
Los piercings en el labio pueden causar daños en los dientes y las encías, especialmente si la joyería golpea o roza constantemente estas áreas. Habla con tu profesional de piercings sobre las opciones de joyería que minimicen este riesgo, como aros de material blando o con protectores de goma.
Alergias y reacciones
Algunas personas pueden experimentar reacciones alérgicas o irritaciones debido a ciertos materiales utilizados en la joyería del piercing. Si sospechas que tienes una alergia o sensibilidad, infórmaselo a tu profesional de piercings para que puedan elegir la joyería adecuada.
Dificultades en la cicatrización
Cada persona es diferente, y algunas pueden experimentar dificultades en la cicatrización del piercing labio. Si experimentas dolor, inflamación o enrojecimiento persistente, consulta a un médico o a tu especialista en piercings.